viernes, 25 de octubre de 2013

Un día, dos castillos.

Hoy, día lluvioso y otoñal, visité dos castillos con mis compañeros de l´École: el de Pierrefonds y el de Compiègne, ambos cercanos a París.
 
 
El castillo de Pierrefonds original, procede del medioevo; sin embargo, hoy en día podemos visitar el restaurado bajo la dirección de Viollet- Le-Duc, en el siglo XIX. No nos olvidemos que este arquitecto fue uno de los grandes de la restauración -que hoy llamaríamos reconstrucción-, que orientó todos sus proyectos según su premisa: "Restaurar un edificio, no es repararlo o rehacerlo, sino restablecerlo a un estado completo que puede nunca haber existido" (entrada "Restauración", en  su "Diccionario razonado de la arquitectura francesa del siglo XI al XVI"). En la rehabilitación del castillo, Viollet-Le-Duc concibió una serie de elementos estructurales y decorativos procedentes de la Edad Media y del renacimiento: gárgolas, todo un bestiario de seres híbridos, rosetones, personajes vinculados a la cristiandad, se combinan con otros elementos de influencia posterior.
 

                                     


 


[No dejen de mirar el detalle simpático y de visibilización del arquitecto que concibió la obra, a los pies de la escultura solicitada de Santiago el Mayor: "Viollet Le Duc". De hecho, el rostro de "Santiago" fue realizado tomando como modelo al arquitecto en cuestión].
Cada una de las torres del edificio, está dedicada o, a un gran hombre de la antigüedad pagana, de la Biblia, o del Cristianismo, como Julio César o Carlomagno. Pero, en este lugar encontramos que también hay un espacio dedicado a las "grandes mujeres" de la Antigüedad. Un juego de revaloración masculina y femenina, voluntariamente decidida en cuanto a los personajes escogidos, se puede apreciar en este lugar.
 
Pierrefonds, además, hay sido clasificado Monumento nacional y forma parte del sistema que los integra, regula y dirige. Aquí pueden encontrar más información al respecto:
 
http://pierrefonds.monuments-nar ationaux.fr/es/
 
 
 
 


 
 
La Compiègne, otro simpático pueblito de Francia, alberga uno de los castillos más espectaculares que haya visto, el cual presenta tres museos, incluido uno sobre los vehículos que, lamentablemente, esta vez no pude visitar. Sin embargo, tuvimos acceso a uno que generalmente permanece cerrado: el museo de la Emperatriz. Una de las cosas fabulosas que se puede encontrar en este espacio, es la tapicería y el arte de los tejidos. La Compiègne, lugar que en el siglo XIX tuvo un papel importante durante el gobierno de Napoleón I y Napoleón III (de hecho uno de los museos es el del Segundo Imperio), conserva una serie de cortinajes que han sido completamente restaurados, así como toda una sala cuyo mobiliario posee tapicería procedente del siglo XVIII, con los consabidos problemas de la conservación delicadísima de la textilería y, más aún, cuando esta incluye hilos de metal precioso que tienen un proceso de degradación natural que hay que controlar.




 
 
En dicho museo, la gran cantidad de cerámica de Sèvres, vajilla, así como muchos modelos y esculturas de Jean Baptiste Carpeaux, un antecesor del gran Rodin, se disponen en diferentes salas, permitiéndonos adentrarnos en la vida noble de la época.
 
Un dato más: en la Compiègne, uno puede ver el molde de una escultura y la escultura realizada. Fíjense en las tres fotos siguientes: el primero es el molde, el segundo es el detalle donde se perciben las partes ensambladas -y desarmables- del molde y finalmente... voilà! la pieza en sí misma.
 
 


 
 
De igual forma, el genial y pequeño museo de la Emperatriz, muestra muchos trajes y zapatitos del siglo XIX, cosa excepcional porque no se conservan muchos ajuares completos de época. En esta página pueden hacer también una visita en 360 grados! http://www.musee-chateau-compiegne.fr/
 
Esperando que disfruten de las imágenes y los datos que les dejo, los animo a mirar más en los links que acompañan el texto y bonne visite virtuelle!


Bosques de la Compiègne: era uno de los lugares favoritos de cacería de la nobleza.

Llegando a Pierrefonds
 
 
 

2 comentarios:

  1. Resulta interesante disfrutar de París, de sus lugares y exposiciones a través de tu blog. No sabía nada de estos castillos. Me ha impresionado de manera especial la arquitectura de el de Pierrefonds, y ya me gustaría ver más de su interior. Un abrazo, continúa con tus paseos y sigue compartiéndolos.

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  2. Gracias por el comentario! De hecho creo que te parecería muy interesante el Castillo de Pierrefonds porque fue completamente transformado por Viollet Le Duc en el siglo XIX! Espero postear más cosas este fin de semana! Un abrazo.

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