domingo, 13 de octubre de 2013

Musée de l´Orangerie: Frida Kahlo-Diego Rivera. L´art en fusion

Hoy, domingo 13 de octubre de 2013, decidí salir de la cobija que me guarecía de los 10 grados que soportamos en París e ir al Museo de la Orangerie, conocido por su exposición permanente de las grandes telas de Claude Monet, en donde logró plasmar la belleza en la simplicidad, de unos nenúfares posados sobre el agua, generando una atmósfera de paz y sosiego, como si uno estuviera asistiendo a la observación real de tal explosión de luz y armonía.

Musée de l´Orangerie.
Pero hoy no iba por los nenúfares, ni por Marie Laurencin, Utrillo, Soutine o Picasso, sino por Frida Kahlo (y  más por ella que por Diego Rivera), porque no siempre uno no siempre tiene la suerte de permitirse experimentar esa fascinación de estar delante de esa intensa expresión de la interioridad de un ser humano, plasmada de manera surrealista a veces, otra realista y cruda -como en su cuadro "Unos cuantos piquetitos"- , como ocurre con la obra de Frida Kahlo.

La exposición llamada "Frida Kahlo- Diego Rivera. L´art en fusion" (el arte en fusión), cuyos afiches invaden las líneas de metro, convirtiendo ese espacio en verdaderas "salas" (pasillos, etc.) de exposición; tenía una lógica museográfica clara y sencilla. Cinco salas narraban la historia de dos pintores, cuya vida estuvo unida por el amor en su versión más tumultuosa, la lucha política y el arte. Después de entrar a un espacio recreado, con cactus falsos como  la casa que compartieron ambos artistas, uno se interna en la historia de ambos a través de bocetos, fotos y algunas obras que permitían ver, sobretodo, la evolución artística del pintor, 20 años mayor que Frida.

Tras ello, uno se encuentra en una gran sala que alberga una más pequeña, que funciona como el corazón de la exposición, donde se encuentran los cuadros más celebres de Frida, trabajados en pequeño formato y que reflejan su manera de ver el mundo.

La salida, no obstante, se resolvía de una manera un poco floja: un panel donde se hablaba de la "fridamanía" que surgió desde los años 80, muestra una serie de fotos de diferentes artistas (Amy Winehouse, Salma Hayek...) vestidas a la usanza mejicana, como lo hizo la pintora a la que se le denomina como la más relevante de la América Latina en el siglo XX.

No está demás decir que la espera de casi dos horas para poder entrar a ver, en mi caso, por vez primera, la obra de esta gran mejicana, valió la pena, pero sobretodo, por ver de cerca, sus pinturas. Sin embargo, la "fusión" entre ambos artistas a la que aludía el título de la muestra, no se lograba percibir totalmente en la exposición. Una acumulación de fotos y cuadros donde ambos se retratan no me transmitió, del todo, esas vidas intrincadas, inexplicables la una sin la otra para comprender a cabalidad la producción artística de ambos grandes, tan diferentes, del arte latinoamericano del siglo XX. Quizás porque, ellos mismos, siempre estuvieron juntos, caminando juntos y por caminos disímiles.

Tras visitarla y mirar el merchandising producido para esta exposición, la bibliografía existente sobre ambos; y, luego de haberme llenado el alma de la explosión de colores escogidos para la panelería, pude salir al gris París, tomar un chocolate caliente mirando a lo lejos la Tour Eiffel y escribirles este post.
Esta exposición temporal va hasta enero de 2014.
http://www.musee-orangerie.fr/ 

4 comentarios:

  1. Tuve la oportunidad de visitar una exhibición dedicada a Frida y Diego a principios de año en la Galería de Arte de Ontario (AGO) y me sorprendió el amplio merchandising alrededor de Frida. Tasas, imánes, aretes, etc. fueron muestra palpable del interés por ella, en contraste al desinterés por Diego.

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  2. Gerardo! gracias por tu comentario. Es cierto. Alrededor de Frida Kahlo, el merchandising es impresionante. ¿Habría que preguntarse, por qué? ¿Quizás porque fue una mujer fuera de serie para su época, incluso? ¿las historias complicadas venden? Lo cierto es, que ella, es un ícono.

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  3. Genial Gabriela! vamos a caminar más por París, juntas también! :)

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